martes, 20 de julio de 2010

Una noche en Dalaran

El sol ya se está escondido, no se logra ver muy bien a la distancia, llevo horas navegando por los cielos y mi cuerpo no da mas. Tras unas horas, ya de noche, llego ante una imponente ciudad, la cual me deja perplejo, sus maravillosas construcciones distraen mi mirada, su ambiente es diferente al de las demás ciudades en las que he estado, sin embargo, llevo tantas horas navegando estos helados cielos que tengo las manos entumecidas, la cara congelada, sin embargo ya empiezo a sentir el calor de esta majestuosa ciudad, la nueva metrópolis, mi nueva capital.

Al entrar en la ciudad hay bastantes mercaderes gritando de forma descomunal, una gente corriendo de un lado para otro, otros saltando sin cesar, esto no es normal y unos segundos después de entrar me empiezo a sentir extraño... maldita sea! algo sucede en mi mente, no logro pensar y descifrar mis ideas, lo que me dicen mis compañeros me es difícil de entender, ¿será el ambiente de esta ciudad?. A pesar de esa extraña sensación empiezo a buscar un lugar donde pasar la noche, hasta que porfin encuentro una amigable orca que me deja pasar la noche en su ciudad, a pesar de que la ciudad es bastante fría y estar lejos de casa, el calor de las antorchas y las pieles con las que me abrigo me hacen sentir como si estuviera en casa. Solo espero que el día que está por venir sea diferente al de hoy.

A la mañana siguiente me levanto temprano, con la esperanza de seguir con mis aventuras un día mas, al parecer esa extraña sensación en mi mente ha mejorado, me es mas fácil entender lo que pienso, escuchar a los demás. Unos minutos mas tarde empiezo a explorar esta nueva ciudad, la cual puedo sentir que me sorprenderá. Al salir del lugar donde donde me hospedé empiezo a caminar, la ciudad está diseñada en círculos y donde quiera que mire encuentro algo que me llama la atención. Después de bastante tiempo caminando me doy cuenta de algo muy especial de esta ciudad, orcos y humanos pasan unos junto a otros, trolls y elfos de la noche están en la fuente de la ciudad, no muertos y gnomos son capaces de no hacerse daño los unos a los otros, definitivamente esta ciudad me gusta cada vez mas...

Mas tarde, empieza a volver esa extraña sensación a mi mente, todo empieza a moverse, mi mente comienza a nublarse, mis movimientos se hacen mas torpes, me demoro mucho mas en lograr hacer unos simples cortes en las joyas que conseguí en mis aventuras del día anterior, mi mundo empieza a derrumbarse, simplemente me dan ganas de salir corriendo de acá, así que salgo corriendo, llamo a mi fiel dragón y salgo volando de la ciudad. Al alejarme de esta, recobro los sentidos, mis movimientos regresan a la normalidad, no logro entender que pasa en esta ciudad! Un par de horas mas tarde, y unas cuantas aventuras después me urge la necesidad de volver a esta ciudad ya unas horas mas tarde, pues mis bolsas están llenas y ya es de noche, así que emprendo vuelo hacia esta majestuosa y a la vez extraña ciudad.

Al llegar todo es muy diferente a como lo era por la mañana, hay mercaderes gritando y no se logra escuchar nada, gente corriendo de un lado a otro en la ciudad, pescando en las cloacas, bailando de un lado para otro, no hay paz! ¿qué ha pasado con mi hermosa ciudad, con mi capital? en vez de ser mi adorada ciudad, ¿es la nueva Sodoma y Gomorra?

Música de fondo: Noches en BCN - Nach y ZPU

No hay comentarios:

Publicar un comentario