sábado, 21 de agosto de 2010

*Yawn*

Creo que es difícil escribir algo cuando tengo un bloqueo mental, no se me ocurre un tema del cual escribir, no surgen argumentos por los cuales debatir, y en especial, no se me ocurre nada que decir...

Mejor, voy a contarles una historia....

Apenas empieza a amanecer y yo ya me encuentro despierto, ando volando entre el manglar en Sholazar, minando como suelo hacerlo para ganar unas cuantas monedas de oro y asó poder tener algo en mi mesa para el almuerzo. Sin embargo, siento que el día de hoy será un día diferente a los demás, es como si los espíritus animales dentro de mi me quisieran decir algo... Pasado un rato, tengo que ir a la gran metrópolis de hoy en día, pues quedé de encontrarme con unos amigos para ir a cazar algunas criaturas y divertirnos un poco, así que nos vemos afuera del bar que con frecuencia visitamos, donde todos los viajeros llegan, y que alguna vez tuve que pasar la noche allí...

Mientras íbamos saliendo de la ciudad en busca de nuevas aventuras, empieza otra vez esa extraña sensación dentro de mi, contándoles a la ves a los que iban conmigo, sin embargo, terminé escuchando solo risas a mi alrededor, igual, no les hago caso... Después de llenar salpicar nuestras vestimentas con sangre de diferentes criaturas, de rasgarles la piel para venderla, de revisar lo que traían con ellos y de pasar un buen rato me tengo que separar del grupo, la sensación cada vez es mas fuerte de que algo raro pasará, así que agarro una piedra blanca con ciertas inscripciones azules que siempre traigo conmigo, que cuando me siento en un lugar extraño y sin salida, me recuerda a mi hogar y de alguna manera extraña termino apareciendo en mi hogar.

Luego de un "extraño" viaje, alguien me dice "Pssst no quisieras asaltar la fortaleza congelada?" y sin dudarlo le respondo que si y en cuestión de minutos ya nos encontramos en las imponentes puertas de esta y en un abrir y cerrar de ojos ya llevamos mucho mas de medio camino dentro, mas de media docena de enormes monstruos muertos, hasta que llegamos a un extraño lugar, una especie plataforma y al final un extraño hombre con una armadura sentado en un trono, todos nos preguntamos al tiempo que era eso, el rey de la fortaleza? o simplemente un cadaver de hace mucho tiempo? La duda se apoderó del grupo, no sé que hacer, doy el primer paso y lo ataco? hasta que veo a otro valiente guerrero salir corriendo hacia el, desempuñando su enorme hacha, y justo en ese momento yo empiezo a hacer un hechizo para...

*Riiiiiing* Agh maldita sea, me quedé dormido otra vez....

1 comentario:

  1. pues seguro te tiro un sleep y pasaste a ser un zombie mas de arthas.. :D

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